¿Qué es la reduflación?

Es una forma de saltarse la inflación, en la que se reduce la cantidad del producto, pero el precio sigue siendo el mismo o incluso puede subir. Por tanto, la reduflación es beneficiosa para los supermercados, pero las consecuencias no son las mejores para los consumidores.

¿Qué es la reduflación?

Yogures, mantequilla, helados, galletas, papel de cocina... ninguno de ellos parece escapar a la "discreta" tendencia a cambiar la cantidad de producto dentro del paquete, manteniendo o incluso aumentando el precio de compra. Es lo que se llama reduflación, que en la práctica consiste en reducir un paquete que contiene 250 g de producto a 200 g o, por ejemplo, en el caso de los pañuelos de papel o el papel de cocina, reducir el número de hojas aumentando el tamaño del tubo para que parezca exactamente el mismo.

En algunos casos, la cantidad disminuye y el precio aumenta, por lo que el consumidor paga más por menos. Cuando la inflación es muy alta, como hemos visto recientemente, la reduflación se acentúa, sin que el consumidor se dé cuenta la mayoría de las veces. Y aunque no es ilegal -ya que las nuevas cantidades siempre se indican en el reverso-, a menudo pasa desapercibida, engañando a los consumidores.
 

Cómo protegerse de la reduflación

La reduflación es cada vez más frecuente, sobre todo en épocas de mayor inflación de precios. Puede afectar a diversos productos, como los de higiene, los detergentes, los alimentos, etc. Por lo tanto, requiere un ojo más atento a la hora de ir al supermercado, pero también más información disponible para saber qué hacer cuando nos encontremos con un caso así.

Una vez más, la información y la atención son los principales aliados de un consumidor informado y capacitado. Además de dominar el concepto, es importante prestar atención y adquirir el hábito de comprobar las cantidades en los envases (normalmente en kilogramos, gramos, litros, centilitros, mililitros o unidades), así como comparar las etiquetas de los precios de los productos y prestar atención al valor por kilo, litro u otra medida.

Además, compartir y buscar información es muy importante antes de tomar cualquier decisión. En el Libro de Quejas, puedes comparar marcas y ver sus principales indicadores de reputación. Lea las experiencias de otros consumidores, lea los índices de satisfacción y conozca el apoyo real que le ofrece una empresa, siempre que lo necesite.


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