Los consumidores, exprimidos

La idea de hacer de pago las carreteras españolas supone otro desajuste en los maltrechos bolsillos de los consumidores

Los consumidores, exprimidos

Esta semana que está apunto de acabar no puede decirse que haya sido “otra semana más” casi para ninguno de los españoles. Y no solo por esta pandemia que azota la aldea global y nuestras vidas desde hace demasiado tiempo o, en términos más locales, las recientes elecciones en la Comunidad de Madrid.

Sin duda, desde el punto de vista del consumidor y sin dejar atrás las menciones anteriores, la noticia de esta semana, y probablemente la noticia del mes para los consumidores españoles, es la decisión por parte del Gobierno central de plantear hacer de pago las carreteras españolas, ¿un globo sonda quizás?

No es un asunto nuevo, pues a nadie se le escapa que en diferentes épocas se ha puesto sobre el tapete dicha posibilidad.

Lo que quizás ahora sí es relevante es que esta información se plantea en un escenario en donde los bolsillos de los contribuyentes están en una situación delicada, fundamentalmente debida a esta dramática realidad sanitaria que ha traído no solo la desgracia personal a muchas familias sino también la imposibilidad de poder seguir sacando adelante sus negocios o puestos de trabajo con una sensación, en muchos de nosotros, de continúa inestabilidad y futuro incierto.

Sin querer tomar partido ante un planteamiento como este, solo cabe apoyar y animar a los consumidores a hacer frente a situaciones que consideren que vulneran sus derechos, llevando este clamor más allá de una simple charla entre familiares o amigos.

Todos nosotros podemos plantar cara, como individuos, a aquello que consideremos que nos debilita como individuos.

 


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