El 3 de octubre pasado, solicité un viaje a través de la aplicación Uber. Se indicó de inmediato un conductor con solo 4 minutos de espera.
Pasaron los cuatro minutos y el conductor seguía de pie. Inmediatamente después comenzó la marcha, sin embargo, en la dirección opuesta a mi ubicación. Me tomó más de 12 minutos y terminé llamándome a través de la aplicación pidiendo cancelar el viaje. Por supuesto que no cancelé y advertí que no lo haría. El conductor insistió y dijo que solo pagaría de 2 a 3 euros de tarifa de cancelación. ¿Cómo puede el conductor pedirle al cliente que cancele y pague? Insistí nuevamente en que no lo haría, y el conductor colgó la llamada y canceló el viaje.
Con toda esta situación, perdí más de 15 minutos, lo cual es lamentable y un servicio terrible.
Fecha de incidencia: 20 de octubre 2019
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